"El Jesucristo de los santos de los ultimos dias"

Un amargo trago como religión, la inercia como los versiculos de mi biblia, que estan escritos en el carton de aquella caja, y encerrados en dentro del vidrio de la botella de mi vida, que gira y gira, tumbada por los suelos empedrados de horas y minutos, sin entrada ni salida, aquella botella que brilla y brilla, y que a todos deslumbra, pero que ninguno de los deslumbrados habitaria...

Sexo Libre!!!

Esto del calentamiento global, nos esta calentando a todos...la naturaleza nos establece los limites en nuestro cuerpo, ellas no se pueden resistir a sus cuerpos: la primera con un traje rojo y pintas negras que desbordan de lujuria su caminar y que son la llave para abrir las piernas de esa arañita de rincon...la seducción llega al límite, estan en su punto máximo deleitandose una a otra,en una telaraña tejida por el líbido desbordante y la lujuria como el mayor placer de ambas viciosas señoritas de verano...MAs que un desliz...un incontrolable vicio

Acercate a bokitoki

Y si un grupo de niños hijos de papi, pueden crear una secta universitaria...porque bokitoki no puede ser nuestro redentor?...porque no puede ser nuestro dios? mañana mismo comenzamos la construcción de los templos sepultando la poca y manoseada idiosincracia que nos ha dejado el cristianismo...ACERCATE A BOKI TOKI; AHORA YA!!!...

Los 20 bailes de la desdicha y un miembro acongojado

Maldiciones al mundo, escupos verdes y jugosos que lanzaba impulsados por la angustia de mi odiosa mirada, te llegaban como piedras al cristal de tu interior, que se rompía en mil pedazos, y sus trozos llenos de filo , terminaban por morder el miembro en busca de calma, aquella calma que a la vez combatía con el rencor y desazón que me producía la sangre caliente que lo envolvía. En aquel justo momento, en que la moral celebraba su triunfo, con tu libido bajo el brazo y los revolcones de “rayuela” y mis alucinaciones con la maga se consumían tal y cual como lo hace el cigarrillo que yace en mis labios, de entre el humo de la desdicha, y unos dobleces de papel apareciste tú, mi mas fiel compañera y amante, extasiándome y saciando hasta los mas asquerosos apetitos de aquel instante…me envolviste en tu esencia misma, que no paraba de extrañar, pero solo me quedé con las delicias de tu cuerpo en el recuerdo y el amargo pisar de mi camino de regreso, volviendo a odiar, a escupir verdes y jugosos escupos, caminar maldiciendo al mundo…